HARBIN, China.- Ver pornografía se ha convertido en un verdadero trauma para el policía chino Liu Chunqui, quien tiene que dedicar la mayor cantidad de horas de su día a esta actividad, una tarea que lo tiene bastante cansado y afectado.
Ocurre que en este país, la censura es un tema relevante, y si bien en la web existen sistemas que bloquean contenidos en forma automática, en la calle se siguen vendiendo DVD's con material para adultos, por lo que las fuerzas policiales tienen que disponer de personal que reviste los discos confiscados durante todo el día para determinar si es pornografía o no.
Ocupando este puesto, Chunqui dice haber visto más de 600.000 videos porno desde que comenzó su trabajo. Explica el portal "Rocket News" que se estima que diariamente, en promedio, observa 330 clips, en extensas jornadas que llegan a provocarle constantes ganas de vomitar y pérdida de apetito, entre otros síntomas físicos.
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